Como podemos observar, cada uno de los modelos societarios expuestos anteriormente, ofrece distintas características para sus miembros. Por ello siempre lo más recomendable asesorarse y conocer a detalle qué tipo de sociedad es la que más nos conviene constituir de acuerdo con el modelo de negocio que se pretende realizar y los recursos económicos con los que se cuentan. 

Ahora bien, ya que conocemos los tipos de sociedades y sus características, es importante destacar que usualmente existe un aspecto que regularmente se pierde de vista al momento de constituir una sociedad, y posteriormente trae problemas o repercusiones a los socios o a la misma sociedad, hablamos de la celebración de pactos parasociales. 

Es común que al iniciar, todos los socios que formaran parte de la sociedad, se encuentren en la mejor disposición, por lo cual se convierte en el momento perfecto para establecer reglas que prevengan conflictos futuros, principalmente estableciendo en los estatutos sociales que se permita la celebración de pactos entre socios, con el propósito de un mejor funcionamiento para la sociedad.